BALONCESTO EDUCATIVO

JUEGO, FORMACION, DEPORTE, COMPETICION, CIENCIA, ARTE, EXPRESION, COMUNICACION, DIVERSION, APRENDIZAJE, AMISTAD


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Precisión y Calidad de Movimiento

SALUD Y RENDIMIENTO
DEPORTE Y DOCENCIA

Nicoló Mannion (ITA) – FIBA Olympic Qualfying Tournament Belgrado (4 July 2021)

PRECISIÓN DE MOVIMIENTO = CALIDAD DE MOVIMIENTO


La totalidad del cuerpo humano en la expresión del movimiento del Jugador – Atleta – Deportista.
El juego de Baloncesto presenta problemas complejos en la práctica y en las respuestas motrices de adaptación.
La necesidad de despertar el sentido común y la curiosidad para aprender e incorporar cosas nuevas a nuestro día a día como Entrenadores – Instructores – Preparadores, a la propia metodología.


“El sistema nervioso central no sabe nada acerca de los músculos, sólo sabe acerca de movimientos” (Jackson, 1889).


El sistema nervioso central (SNC) entiende el movimiento con la intención y con las demandas del contexto.
El cuerpo moviliza sus recursos disponibles para dar lugar a una acción completa-integral que cumpla el objetivo buscado, la respuesta motriz a un problema planteado.
Las experiencias motrices se almacenan en nuestro SNC dentro de las dinámicas de los procesos de aprendizaje (aprender movimientos) para utilizarlos en el futuro como base para otras acciones que guardan ciertas similitudes o semejanzas).
Los patrones o mecánicas ineficientes se almacenan de igual forma que los eficientes.
A medida que avanzamos en enseñanza-aprendizaje y entrenamiento, aplicamos carga externa, velocidad o complejidad a los movimientos, lo que genera tolerancia a la carga.
Un movimiento puede lograr su objetivo siendo EFICAZ pero no EFICIENTE (mejores recursos disponibles).

PRODUCCIÓN DE FUERZA ÚTL


La producción de fuerza útil en un gesto o en una acción específica empleada para la ejecución de un movimiento, desplazamiento, lanzamiento…depende de:

  • VECTOR DE FUERZA.
  • MAGNITUD DE FUERZA.
  • TRANSMISIÓN DE FUERZA a lo largo de la cadena cinética implicada en el movimiento.
S. Tonut (ITA) y V. Micic (SRB) – FIBA Olympic Qualfying Tournament Belgrado (4 July 2021)

VECTOR DE FUERZA


Es la dirección dada a la aplicación de la fuerza. Depende de la postura-posición que damos a nuestro cuerpo para aplicar esa fuerza en acciones de desplazamiento, gestión de un móvil (pase, lanzamiento, bote)…y de la posición del apoyo respecto al resto del cuerpo y de la eficiencia de ese apoyo para transmitir la fuerza contra superficie-suelo.
La fuerza se representan mediante un vector, que es una flecha cuya longitud indica la magnitud de la fuerza, su dirección es la de la fuerza, el origen indica el punto de aplicación y la orientación del extremo el sentido de la fuerza.

MAGNITUD DE FUERZA


Depende de cuánta cantidad de fuerza somos capaces de producir a nivel muscular (fuerza máxima x tiempo) y del rango articular (ROM). En función de la posición de nuestros segmentos corporales el músculo se situará en una posición de longitud-tensión u otra, y esto nos permitirá aplicar más o menos cantidad de fuerza. También es de suma importancia cómo de larga es la palanca para aplicar la fuerza en relación con el rango articular.

TRANSMISIÓN DE FUERZA


Ubicación y capacidad de la musculatura de seleccionar el momento preciso para actuar con un efecto óptimo. Cómo coordinar segmentos musculares en el tiempo y en el espacio. Coordinación sinergistas-antagonistas para que no se disipe fuerza a lo largo de toda la cadena motriz y se cumpla el objetivo.

FIBA Olympic Qualfying Tournament Belgrado (4 July 2021)

ANATOMÍA > FISIOLOGÍA > CONDICIÓN FÍSICA

VECTOR DE FUERZA

POSTURA

  • Inclinación, flexión del tronco hacia adelante.
  • Posición de la pelvis y de la musculatura de la cadera para alineación respecto a otros elementos adyacentes y su capacidad para aplicar fuerza en según qué direcciones. Ejemplo: fuerza horizontal para aceleración.

APOYO

  • Su posición cambia cómo se sitúan el resto de segmentos corporales a nivel pelvis-cadera, y la acción muscular será diferente.
  • Aplicación de fuerza óptima a nivel músculo-tendón del complejo pie-tobillo.

MAGNITUD DE FUERZA ANALÍTICA

TRIPLE EXTENSIÓN

  • Capacidad muscular para propiciar el movimiento (glúteo, isquios…).

RANGO DE MOVIMIENTO SUFICIENTE EN TOBILLO

  • Garantiza los buenos apoyos, firmeza (steafness) de pie-tobillo para acción reactiva (mayor fuerza en menor tiempo posible).
  • Alineación segmentos del pie.

TRANSMISIÓN DE FUERZA

TIMING – COORDINACIÓN

  • Cuerpo del Jugador como un sistema en que cada segmento o parte analítica desempeña una función marcada por el contexto y su relación con el resto de componentes.
  • Relación entre los segmentos corporales para producir fuerza útil en el movimiento óptimo.

FIBA Olympic Qualfying Tournament Belgrado (4 July 2021)

ESTRUCTURA <=> FUNCIÓN


ESTRUCTURA (tejido, etc.) en disposición y con capacidad suficiente de trabajar. Enseñar a ESTRUCTURA a desempeñar su rol dentro de un sistema con el resto de componentes para realizar los movimientos básicos que se repiten infinidad de veces durante la práctica (carrera, cambios de dirección, deceleraciones, paradas, salidas-arrancadas, aceleraciones, saltos-caídas, lanzamientos…)

  • Preparada para asumir carga de trabajo.
  • Preparada para cumplir la función que se le requiere dentro del sistema que desempeña el movimiento completo de la respuesta motriz.

ANÁLISIS

Reducir el riesgo lesional con el foco en la globalidad de los movimientos.

¿Qué problemas motrices se plantean al Jugador dentro de la práctica? ¿Cómo los solventa? ¿Qué movimientos aparecen? Correr (¿a qué intensidades?), cambiar de dirección y/o de sentido…Todo con información compleja del contexto e interacción con compañeros, adversarios, balón, espacios, tiempo, reglamento. Cómo se mueve el Jugador, y en relación a qué información.

Relacionar acciones, saltos por ejemplo, con cómo se producen:

  • Propulsión con alineación correcta de segmentos corporales.
  • Timing en flexo-extensión.
  • Aterrizaje.
  • Absorción de fuerzas.

Dentro de la práctica y del juego se producen saltos menos analíticos. Cómo se organiza el cuerpo del Jugador para hacer frente a determinados movimientos, a diferentes situaciones contextuales que requieren soluciones motrices.

PLANIFICACIÓN

Valorar nuestras posibilidades de trabajo, el tiempo que dedica el Jugador a un programa de reducción lesional: periodizar y progresar con la carga.

INTEGRACIÓN EN LA PRÁCTICA

Adherencia y evaluación continua del programa de entrenamiento sobre incidencia lesional y sobre el rendimiento. COMUNICACIÓN y MOTIVACIÓN para adherencia en el tiempo.

Calidad de movimiento en el calentamiento y en las rutinas de activación.

Primera parte de la formación aprendida en Uniciencias (Unicaja Club Baloncesto), sección basada en la evidencia científica para profesionales del deporte bajo el patrocinio de Genologica. En esta ocasión, la readaptadora de la clínica Invicta Salud Deportiva Ana de la Fuente nos guía sobre la calidad de movimiento en la prevención y readaptación de lesiones deportivas.


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La ciencia de la complejidad revela el papel de la estrategia, la sinergia y el grupo

Sergio Rodriguez celebrates - AX Armani Exchange Milan - EB20
Foto EuroLeague Basketball – Sergio Rodriguez (AX Armani Exchange Milan)

¿Es un gran equipo más que la suma de sus jugadores? La ciencia de la complejidad revela el papel de la estrategia, la sinergia, el enjambre y más.

El interés por el comportamiento colectivo no es nuevo. Ha sido objeto de investigación de académicos de la organización, antropólogos, economistas, etólogos que estudian animales que viven en grupo y biólogos evolutivos interesados en la evolución de la cooperación. Y, por supuesto, es la ocupación principal de los entrenadores y gerentes que forman equipos en una amplia gama de deportes. Aunque muchos de nosotros creemos que un equipo es más que la suma de sus destacados artistas individuales, este tipo de pensamiento ingenuo todavía domina el reclutamiento y el montaje de equipos en los deportes, las finanzas, la academia y otros entornos.


Parte de la razón por la que los reclutadores y otros recurren a perseguir a los mejores jugadores en lugar de formar el mejor equipo es que no está claro qué otros factores contribuyen a la grandeza del equipo y cómo cuantificarlos. Además, simplemente reclutar a los mejores jugadores es bastante sencillo, y algunos análisis sugieren que este enfoque podría ser incluso el más confiable: como argumentaron el sociólogo Duncan Watts y sus colaboradores, el nivel general de talento es a menudo el mejor predictor del desempeño del equipo. Sin embargo, no deberíamos sentirnos atraídos a pensar que el talento general es el mejor predictor porque es el factor más importante. Podría ser el mejor predictor porque todavía no somos buenos para captar los matices de la dinámica colectiva. Los indicios de que este podría ser el caso provienen de estudios como el del erudito en administración Satyam Mukherjee y sus colaboradores, en el que encontraron que el éxito compartido previo puede predecir el desempeño más allá de lo que se esperaría de la composición y el talento del grupo.


Estos resultados aparentemente contradictorios plantean la pregunta: ¿Cómo funciona exactamente un colectivo? ¿Cuándo es más que la suma de sus partes? La creciente disponibilidad de datos sobre la toma de decisiones individuales en las ciencias sociales, junto con la forma en que la ciencia de la complejidad está mejorando nuestra comprensión de la mecánica del desempeño grupal, está cambiando lo que es posible. Algunas de las preguntas que ahora se pueden responder incluyen cómo se sincroniza un equipo, cuándo las contribuciones son sinérgicas en lugar de aditivas, y si es la habilidad de los jugadores o las estrategias que usan lo que es más importante. Sin embargo, antes de llegar a direcciones futuras prometedoras, vale la pena considerar el espacio existente de ideas sobre lo que hace a un buen equipo, así como algunos escenarios que sugieren que se requieren mayores matices.


En su libro The Captain Class (2017), Sam Walker, editor adjunto de empresas en The Wall Street Journal, sostiene que una clave para el desempeño del equipo es el liderazgo, definido no por el carisma sino por la capacidad de resolver conflictos y mejorar la moral entre bastidores. La antropóloga Ruth Benedict propuso la cultura como un factor en el desempeño humano, escribiendo en Patterns of Culture (1934):
«Ningún individuo puede llegar ni siquiera al umbral de sus potencialidades sin una cultura en la que participe. Por el contrario, ninguna civilización contiene ningún elemento que, en última instancia, no sea la contribución de un individuo».

El “éxito” se debe en gran parte a la meticulosa microgestión de cada detalle de reclutamiento, programación, entrenamiento y juego.
El énfasis en el liderazgo, la cultura, el proceso sobre el resultado y la atención al detalle en todas las escalas puede parecer obvio. Sin embargo, estas estrategias para optimizar el rendimiento del equipo parten en gran medida del supuesto común de que la clave para formar un gran equipo es reunir a los mejores jugadores. ¿Qué tiene el desempeño del equipo que hace que sea tan difícil conciliar estas posiciones?

VISIÓN, HABILIDADES ORGANIZATIVAS Y LIDERAZGO INSPIRADOR


Algunos entornos promueven la creatividad y la exploración y, por lo tanto, facilitan los descubrimientos positivos relacionados con el azar.


El rendimiento no está garantizado incluso con las personas más talentosas, un entorno cultural constructivo y una organización rica en recursos y con todos los detalles cubiertos. La suerte juega un papel en el rendimiento, aunque su importancia varía según los dominios.


Los deportes como el hockey, con su disco de movimiento rápido, menos oportunidades de anotar debido en parte a que no tienen reloj de lanzamiento y menos tiempo de hielo para los jugadores hábiles, se rigen por una mayor aleatoriedad que los deportes como el Baloncesto, lo que significa que los resultados en el hockey son más difíciles para comprender, predecir y controlar.


Dado que el papel del azar en el desempeño varía, podríamos preguntarnos si es posible crear circunstancias que favorezcan la «buena suerte». El sociólogo Robert Merton en la década de 1950 acuñó el término «microambientes sociocognitivos fortuitos» para captar la idea de que algunos entornos parecen promover la creatividad y la exploración, y así facilitar los descubrimientos positivos relacionados con el azar. Merton estaba reconociendo los factores que dan forma a los equipos más allá del talento en bruto.


Los términos propuestos para el desempeño grupal en las ‘ecuaciones de éxito’ esconden una complejidad que, si se puede explotar, ofrece una ventaja significativa. Esta complejidad oculta, ya sea que favorezca las explicaciones que enfatizan a los jugadores individuales, la dinámica del equipo, el entrenamiento o las fuerzas culturales, captura con precisión cómo estos factores influyen en el rendimiento individual y cómo esto, a su vez, se traduce en el éxito del equipo.


La estadística y la mitología pueden parecer los compañeros de cama más improbables”, reflexionó el biólogo evolucionista Stephen Jay Gould en el ensayo «The Streak of Streaks ”(1988) para The New York Review.
En el ámbito de los deportes de equipo, ha habido una explosión de intentos de responder a Gould en los últimos años. En su libro Moneyball (2003), el periodista financiero Michael Lewis relata cómo la analítica deportiva ahora impacta en las decisiones sobre reclutamiento, entrenamiento, tiempo de juego e incluso estrategia en la cancha; un buen ejemplo es el aumento del tiro de tres puntos en el Baloncesto. Sin embargo, muchos jugadores se sienten frustrados por la ‘tiranía de las métricas’, por mencionar el libro de Jerry Z. Muller de 2018 sobre reemplazar el juicio y la intuición humanos con (típicamente) estadísticas simples.

PRINCETON UNIVERSITY PRESS
Cómo la obsesión por cuantificar el desempeño humano amenaza a nuestras escuelas, atención médica, empresas y gobiernos.

El exjugador de baloncesto profesional y comentarista deportivo actual Jalen Rose sugiere en una entrevista con el New Yorker que el énfasis en las métricas simples insulta la inteligencia del jugador. No logra capturar habilidades difíciles de describir que importan, como comprender ‘el flujo del juego’, y pone demasiado énfasis en medidas fáciles de cuantificar como ‘triples dobles’.


Bill Russell, uno de los titanes del Baloncesto que jugó para los Boston Celtics en la década de 1960, se sintió lo suficientemente convencido como para mencionarlo en su carta de retiro en 1969:
Hablemos de estadísticas. Se supone que las estadísticas importantes en el Baloncesto son los puntos anotados, los rebotes y las asistencias. Pero nadie lleva estadísticas sobre otras cosas importantes: las buenas fintas que haces y que ayudan a tu compañero a anotar; el mal pase que obligas al otro equipo a hacer; el buen pase largo que hace que se configure otro pase que configura otro pase que conduce a una anotación; la forma en que reconoces cuando uno de tus compañeros de equipo tiene una mano caliente esa noche y cedes tu propio tiro para que él pueda tomarlo. Todas esas cosas. Esas fueron algunas de las cosas en las que sobresalimos y que no encontrará en las estadísticas”.

«El primer paso es medir todo lo que se pueda medir fácilmente», escribió Daniel Yankelovich en Corporate Priorities: A Continuing Study of the New Demands of Business (1972). “El segundo paso es ignorar lo que no se puede medir fácilmente… El tercer paso es suponer que lo que no se puede medir fácilmente en realidad no es importante… El cuarto paso es decir que lo que no se puede medir fácilmente realmente no existe”.

FORMAS SUTILES

Shane Battier (Miami Heat): Habilidad asombrosa para mejorar el rebote de los compañeros, de llevar el balón al que está en posición de ventaja, de defender para reducir significativamente el porcentaje de tiro del adversario, de mejorar la eficiencia defensiva de los compañeros de equipo.


Estos problemas: la importancia de las interacciones sinérgicas, cómo las estrategias y los atributos individuales se combinan para producir el desempeño del equipo, cómo los individuos se coordinan en el espacio y el tiempo para volverse fascinantes en su conjunto, y qué papel juegan el liderazgo y el entorno organizacional y cultural más amplio para sacar a relucir lo mejor de nosotros, no son sólo preguntas para los analistas de Baloncesto. De hecho, son preguntas clave para todos los sistemas biológicos, ya que todos los sistemas biológicos, ya sean grupos de neuronas o sociedades animales, se componen de partes que interactúan y que colectivamente descubren soluciones a desafíos ambientales o internos. Y la ciencia de la complejidad, repleta de conceptos matizados y métodos rigurosos, ofrece una lente cuantitativa a través de la cual estudiarlos.


Empecemos con las nociones de «sinergia» y «complementariedad», que se refieren a situaciones en las que el resultado colectivo es mayor de lo esperado al sumar la capacidad individual.
Consideremos el «triángulo ofensivo» de Tex Winter, una estrategia utilizada en el Baloncesto en la que los cinco jugadores en la cancha se espacian dinámicamente de acuerdo con principios geométricos y usan «lectura y ritmo» para abrir la cancha, para pasar. Se le atribuye haber elevado a los Chicago Bulls más allá de las considerables habilidades individuales de Jordan, Pippen y Dennis Rodman, y se cree que sirvió como base para el éxito años más tarde de los Golden State Warriors, dirigidos por el exjugador de los Chicago Bulls Steve Kerr.


El «triángulo ofensivo» es complejo: involucra a varios jugadores, sus relaciones entre ellos, la comprensión del espacio y la intuición, y una pregunta natural sería ¿Cuál de estos aspectos realmente importa? ¿Es la sinergia Jordan-Pippen con algún bono aditivo adicional de Rodman, o su interacción de tres vías es más que la suma de sus partes? ¿No es su interacción en absoluto, sino la estrategia de ataque del triángulo en sí misma, tal vez, como se sugiere a menudo, la forma en que su geometría abre la cancha para los pases, lo que contribuyó al éxito de los Bulls? Del mismo modo, con Shane Battier, ¿está agregando un poco de oportunidad a cada uno de sus compañeros de equipo en la cancha? ¿O su presencia y su conjunto de habilidades difíciles de precisar están cambiando la forma en que sus compañeros de equipo interactúan entre sí de una manera sinérgica?


Los roles de las interacciones sinérgicas y la complementariedad son relevantes más allá del desempeño del equipo para una amplia gama de temas, desde nuestra comprensión de cómo se combinan los medicamentos para tratar enfermedades, hasta cómo funcionan las proteínas y cómo los monos manejan los conflictos en sus sociedades. En consecuencia, diversas medidas estadísticas y teóricas de la información han sido ideadas por científicos de la complejidad para evaluar las diferentes formas en que las contribuciones individuales pueden combinarse para producir resultados colectivos.
Otra idea clave de la ciencia de la complejidad que puede sentar las bases de grandes equipos es la sincronía: la coordinación en el tiempo de partes de un sistema, como células, individuos o nanobots.

FUNDAMENTOS DE “LA MANO CALIENTE” EN BALONCESTO


La evidencia estadística de la «mano caliente» es sólo un punto de partida. ¿Cuáles son las dinámicas neurofisiológicas subyacentes a la «mano caliente» que crean esta sensación de flujo o sincronización a través del sistema de control motor? Aunque todavía no lo sabemos, es muy probable que se trate de una cuestión de sistemas dinámicos sobre cómo las poblaciones o grupos de neuronas llegan a oscilar juntos, similar a cómo las luciérnagas en una noche de verano coordinan sus destellos. Comprender el proceso subyacente no sólo proporcionaría una base mecanicista para la «mano caliente», sino que también podría permitirnos predecir su inicio y duración, lo que facilitaría su búsqueda en los datos de comportamiento y tal vez incluso lo indujera en un jugador que está rezagado. Muchas preguntas fascinantes se convertirían en un juego científico justo, como la sugerencia de Russell de que los jugadores pueden ver cuándo un compañero de equipo tiene la «mano caliente». ¿Qué señales podrían usar los compañeros de equipo para hacer esta evaluación? ¿La señal en las ‘estadísticas’ describe un patrón de comportamiento, es decir, el número de canastas seguidas, o es algo visible en la conducta física del jugador?

Jugador de HEREDA SAN PABLO BURGOS: 37 puntos, 8/10 triples y 43 de valoración.


La posibilidad de que los jugadores perciban «manos calientes» sigue siendo controvertida; su existencia no significa que las «manos calientes» sean tan grandes o tan generalizadas como creen los jugadores. Pero la capacidad de los jugadores para discernir cuándo van y vienen las «manos calientes» en los compañeros de equipo sugiere la posibilidad de una «mano caliente» colectiva. Es decir, a través de la sincronización de su comportamiento, todo el equipo podría volverse «fluido» o «caliente». Esto puede parecer descabellado, pero sucede con regularidad en la naturaleza: las luciérnagas mencionadas anteriormente son un ejemplo. Otros incluyen el coro coordinado de ranas y ritmos circadianos. Entonces, ¿por qué no debería suceder en los deportes? Además, la naturaleza nos ha enseñado que el colectivo puede sincronizarse de diferentes formas. Algunas especies de luciérnagas, por ejemplo, son sincronizadores ráfagas, mientras que otras son ágiles, con diferentes escalas de tiempo que describen el flasheo coordinado y diferentes implicaciones estratégicas. Lo mismo podría ocurrir en la cancha.

Sergio Rodriguez - AX Armani Exchange Milan - EB20
Foto EuroLeague Basketball – Sergio Rodriguez (AX Armani Exchange Milan)


La forma en que los individuos se sincronizan en el tiempo puede tener implicaciones sobre cómo se coordinan en el espacio o «enjambre». El enjambre se refiere en términos generales al movimiento coordinado de los individuos. ¿Cómo coordinan los compañeros de equipo su movimiento para aumentar la probabilidad de que un compañero de equipo atrape un pase por detrás de la espalda en lugar de perderlo? De forma más general, ¿la coordinación en el espacio interactúa con la sincronización temporal para producir un equipo más eficaz en el que los jugadores anticipan las acciones de los demás porque están «sincronizados»? Algunos jugadores funcionan como armonizadores de enjambres, quizás haciendo que las estrategias espaciales dinámicas ofensivas y defensivas sean más efectivas y tengan un ritmo esencial.


En su novela de ciencia ficción Solaris (1961), Stanisław Lem escribió:
Observamos una fracción del proceso, como escuchar la vibración de una sola cuerda en una orquesta de supergigantes. Sabemos, pero no podemos captar, que arriba y abajo, más allá de los límites de la percepción o la imaginación, están operando miles y millones de transformaciones simultáneas, interconectadas como una partitura musical por un contrapunto matemático. Se ha descrito como una sinfonía en geometría, pero carecemos de oídos para escucharla”.

Zach Leday - AX Armani Exchange Milan - EB20
Foto EuroLeague Basketball – Zach Leday (AX Armani Exchange Milan)


De hecho, podríamos ‘carecer de oídos para escuchar’, pero con la ayuda de herramientas y conceptos rigurosos de la ciencia de la complejidad que se basan en la mecánica estadística, los sistemas dinámicos, la teoría de la información y la informática, es posible impulsar la percepción y encontrar el origen de patrones ocultos en fenómenos colectivos.


Las causas de la «mano caliente»; qué hace que la transgresión del «triángulo ofensivo» funcione; si Pippen, Jordan y Rodman estaban mejor juntos de lo que cabría esperar de su talento individual sumado; la idea de que la armonía y la complementariedad pueden ser tan importantes como el número de triples dobles (o incluso la mera posibilidad de que podamos cuantificar el valor de estas distintas contribuciones): estos son solo algunos de los muchos ejemplos en los que nuestra comprensión del desempeño humano puede beneficiarse de una comprensión más mecanicista del comportamiento colectivo. Al hacerlo armados con esa mejor comprensión, finalmente honraríamos plenamente el conocimiento intrínseco de los jugadores y su increíble habilidad colectiva.

Adaptación y traducción del Ensayo All stars – Is a great team more than the sum of its players? Complexity science reveals the role of strategy, synergy, swarming and more, publicado el 27 Noviembre 2020 en Aeon.

Escrito por:

Cade Massey: Profesor en ejercicio en el Departamento de Operaciones, Información y Decisiones de Wharton School of Business en la Universidad de Pensilvania.

Jessica Flack: Profesora en el Instituto Santa Fe en Nuevo México y directora del Grupo de Computación Colectiva en SFI.


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¿Por qué los deportistas necesitan un ‘ojo tranquilo’?

En esta entrada recupero (y traduzco) un artículo escrito por David Robson que leí en BBC Future hace muchas lunas, y que se volvió a publicar el 24 de Junio 2020. Son algunas respuestas a la pregunta «Por qué los deportistas necesitan un ojo tranquilo«. El concepto «ojo tranquilo», «ojo calmado», «ojo silencioso», «quiet eye».

acb Photo – E. Cobos

Los psicólogos y neurocientíficos han identificado algunos de los procesos mentales comunes que distinguen a los atletas de élite. Y uno de los aspectos más intrigantes parece ser un fenómeno conocido como «ojo tranquilo», una especie de percepción visual mejorada que permite al atleta eliminar cualquier distracción mientras planifica su próximo movimiento. Curiosamente, el ojo tranquilo parece ser particularmente importante en momentos de estrés, evitando que el atleta se ‘ahogue’ en momentos de alta presión. Incluso puede conducir al misterioso ‘estado de fluidez’.
“Existe una pequeña ventana de oportunidad para que el sistema motor reciba información de los ojos”, explica Sam Vine de la Universidad de Exeter. «Y los expertos han encontrado una mejor manera de optimizar esa ventana y mantenerla [abierta], lo que ayuda a que los movimientos sean realmente precisos».


Territorios inexplorados

El concepto de ojo tranquilo se origina en las experiencias personales de una kinesióloga llamado Joan Vickers. Como estudiante de ciencias del deporte, y también como atleta entusiasta, Vickers siempre se había interesado en cómo nuestros talentos atléticos varían tanto de un día a otro.
Mientras jugaba en el equipo de baloncesto de la universidad, por ejemplo, una vez anotó 27 puntos extraordinarios en la primera mitad de un partido. En otra ocasión, tuvo una impresionante racha ganadora mientras servía para el equipo de voleibol de la universidad. Pero ambas actuaciones milagrosas fueron únicas: cada vez, su toque mágico desapareció al día siguiente.
“Seguía corriendo por mi cabeza, ¿Cómo pude haber hecho eso? Físicamente no cambié”, dice. Por otro lado, ¿por qué los atletas de élite que ella envidiaba no solo eran tan buenos, sino también tan consistentes?


Al embarcarse en un doctorado en la Universidad de Columbia Británica, Vickers comenzó a sospechar que el secreto estaba en la forma en que los atletas de élite ven el mundo. Conectó a un grupo de golfistas profesionales a un dispositivo que monitorizaba con precisión los movimientos de sus ojos mientras lanzaban sus bolas. Encontró una correlación intrigante: cuanto mejor era el jugador (medido por su hándicap de golf), más larga y fija era su mirada sobre la pelota justo antes y luego durante el golpe. Los novatos, por el contrario, tendían a cambiar su enfoque entre diferentes áreas de la escena, y cada fijación duraba períodos de tiempo más cortos.
La idea general de que debes ‘vigilar el balón’ es bien conocida, por supuesto, pero esto sugirió algo más complejo, con el inicio y la duración precisos de la mirada correlacionados con una medida objetiva del éxito deportivo.
El hallazgo también estaba en desacuerdo con la suposición igualmente prevalente de que la experiencia proviene de un procesamiento mental más rápido. Según los resultados de Vickers, el atleta experto en realidad ralentizó su pensamiento en el momento crucial.
Desde entonces, el ojo tranquilo se ha observado en muchos otros deportes, como Baloncesto, Voleibol, Fútbol, Tenis, Tiro con arco y Hockey sobre hielo . No hace falta decir que la ubicación exacta de la mirada depende de la tarea en cuestión. Durante un tiro libre en Baloncesto, por ejemplo, la mirada debe aterrizar en la parte delantera del aro; para un penalti de Fútbol, debe estar en la esquina superior izquierda o derecha de la red; y para un portero de Hockey sobre hielo, su mirada se detiene en el disco justo antes de que su oponente lo suelte del palo. En cada caso, una fijación final más firme, justo antes del momento crítico, marca al deportista experto, que mantiene la mirada un 62% más que los novatos .
Fundamentalmente, las diferencias en este tiempo de permanencia del ojo tranquilo no solo predicen las diferencias generales entre jugadores de élite y novatos. Las fluctuaciones en el inicio y la duración del «ojo quieto» también pueden explicar lapsos en el rendimiento individual del atleta, lo que reafirmaría nuevamente la idea de que es en sí mismo una parte crítica de los procesos mentales.


Camilo Sáenz-Moncaleano, quien examinó el ojo tranquilo en los tenistas, sospecha que la mayoría de los atletas no habían tomado la decisión consciente de cambiar sus movimientos oculares; para muchos es probablemente un comportamiento que recogieron implícitamente. “No sabrán el nombre del término, pero saben cómo hacerlo”, dice. «Es algo natural».
Sin embargo, los atletas en ciernes se sentirán alentados al saber que se puede enseñar al ojo tranquilo. En una de las primeras pruebas de entrenamiento ocular silencioso, Vickers tomó un equipo de baloncesto de la universidad y los conectó a sus dispositivos de seguimiento ocular para que pudieran ser más conscientes de su mirada mientras practicaban ‘tiros libres’.
Como esperaba, su rendimiento mejoró, en un 22%, durante las siguientes dos temporadas, en comparación con una mejora del 8% en un grupo de control. Al final de la segunda temporada, el equipo había alcanzado un nivel de precisión incluso superior al promedio de la NBA.
La psicología, por supuesto, está repleta de intervenciones aparentemente prometedoras que posteriormente no se han podido reproducir. Pero este no fue solo un resultado único: desde entonces, el entrenamiento ocular silencioso ha ayudado a muchos otros atletas aficionados y profesionales, incluidos los equipos nacionales de voleibol y los tiradores de plato olímpicos, a alcanzar su potencial.

Precisión quirúrgica

Dados estos sorprendentes resultados, los científicos ahora han comenzado a considerar aplicaciones más allá de los deportes de élite. Un estudio de la Universidad de Exeter, por ejemplo, ha descubierto que el entrenamiento ocular silencioso puede ayudar a los niños con problemas de coordinación a mejorar sus habilidades físicas, lo que contradice la creencia común de que, en cambio, sufrían algún problema con el sistema motor en sí.
Las fijaciones más largas son características del ojo tranquilo.
Recopilación de inteligencia avanzada. Como dice Sáenz-Moncaleano, «el ojo tranquilo te permite absorber toda la información del objeto en cuestión, lo que te ayuda a producir la mejor respuesta motora”.
Aún más intrigante, los investigadores de Exeter han descubierto que la duración del «ojo tranquilo» se correlaciona con sentimientos autoinformados de ‘fluir’ o ‘estar en la zona’: la sensación de concentración sin esfuerzo, en la que la mente está libre de todo excepto de la tarea en cuestión. El «ojo tranquilo» también parece coincidir con otros cambios fisiológicos en todo el cuerpo. La frecuencia cardíaca se desacelera temporalmente, por ejemplo, y el movimiento de las propias extremidades se vuelve más suave. Todo esto parece apoyar la idea de que el «ojo tranquilo» filtra la distracción y calma la mente y el cuerpo en el momento crítico, incluso bajo estrés.
Vine advierte que debemos tener cuidado de no asignar demasiada importancia al «ojo tranquilo»; muchos otros factores contribuirán al genio deportivo. Pero ciertamente parecería ser un componente clave del enfoque extremo que a menudo describen deportistas como la tenista Serena Williams.

Según Joan Vickers, esta diferencia radica en parte en la capacidad de concentración que un Jugador es capaz de aplicar o no durante un partido; esta capacidad ha sido investigada continuamente, y ha llevado a Vickers a desarrollar una teoría real: estamos hablando de la teoría del «ojo tranquilo» o, simplemente, del «ojo tranquilo»; se puede utilizar tanto para conocer de antemano los movimientos del oponente como para mejorar el rendimiento propio. El entrenamiento de la vista en calma parece mejorar enormemente la atención y el control de los Jugadores, así como fortalecer sus habilidades motoras bajo presión.


Sam Vine, investigador de la Universidad Exeter de Inglaterra, ha profundizado sus estudios sobre la teoría del «ojo tranquilo», llegando a la conclusión de que esta habilidad estimula la zona dorsal del cerebro y regula la atención enfocada y dirigida hacia la meta. Al respecto, afirmó que “Muchas veces la gente está convencida de que está mirando en la dirección correcta y en cambio se equivoca. La diferencia en el tiempo de enfoque entre un principiante y un experto es mínima, puede ser tan pequeña como una quinta parte de un segundo”.


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Transición: 21 Rip Clear

Sistema de transición temprana al ataque. Con un movimiento inicial ofensivo para darle al pívot 5 un espacio aislado. El alero 2, que recibe el primer pase de 1 llegando, está en una posición sobre extensión de la línea de tiros libres, lo que hace que su defensor elija marcar la continuación de 5 o permanecer unido al tirador. Eficaz sincronización y empleo del espacio en esta acción.

Juego de baloncesto - 21 Rip Clear
Diagrama 1

1, tras pasar a 2, corta hacia la zona y vuelve desde el codo para bloqueo ciego al defensor de 5. 5 gana su espacio en poste bajo. 1 se abrirá fuera de la línea de 3 puntos para recibir «pase de vuelta» (espacio en todos los lados del perímetro). 5 es la primera opción, ganando posición interior o posteando.

Juego de baloncesto - 21 Rip Clear
Diagrama 2

4 debe llegar, en la recepción del balón de 1, a un BD central en ángulo.

Juego de baloncesto - 21 Rip Clear
Diagrama 3

5 despejará hacia el lado opuesto, 2 conducirá con el bote estirando la ayuda de los defensores y 4 continuará al aro con opción de lob o pase más conveniente. Si se marca a 4, entonces 2 abrirá balón a 2, 3 o 5 .

Traducción y adaptación del artículo publicado por Dave Nedbalek
(University of Texas at Tyler Men’s Basketball) el 9 de Septiembre 2020 en FastModel Sports.


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JUEGO A PARTIR DE POSICIONES INTERIORES

JASC 3ª Edición          Vídeo publicado por DAVE COACH

FORMACIÓN AVANZADA DE JUGADORES INTERIORES

José Luis Pichel (Entrenador de Cantera en Real Madrid Baloncesto)

Trabajo de gestos específicos de juego interior, dar a los Jugadores herramientas para rendir. Dar al Jugador interior un abanico de posibilidades, de gestos técnicos que tengan transferencia, que sean compatibles unos con otros para que tome decisiones y los aplique.

GESTOS COORDINATIVOS QUE DEBEMOS TRABAJAR SIEMPRE = FORMACIÓN BÁSICA

  • Manejo de balón.
  • Gestos de dedos.
  • Postura corporal.
  • Velocidad gestual.
  • Ganchos, semiganchos, extensiones.
  • Mikan.
  • Autopases para 2 apoyos.

FINTAS

  • Fintas dobles.
  • Fintas de pase saltando en posiciones.
  • Poder jugar a los dos lados del aro.

FINALIZACIONES

  • Potencia.
  • Dominar los rectificados.
  • Dominar cuerpo en el aire.
  • Fundamental el trabajo abdominal.

GANAR POSICIÓN DENTRO

  • Pases precisos.
  • Pivotes ganadores.
  • Ser capaces de sacar ventaja por altura vertical y también en la dimensión horizontal.
  • ¿Dónde pedir el balón?
  • Generar ángulos de pase.
  • Ganar la posición abriendo ángulos a espacio libre.

SALIDAS

  • Salida en anverso.
  • Salida en reverso.
  • Salidas centro + traspiés para paradas y Tiro.

MOVIMIENTOS CON BOTE

  • Utilizar 2 tiempos de bote.
  • ¿Cuándo jugar sobre bote de espaldas?
  • Elegir centro, fondo o abrirse al Tiro.
  • Finalizaciones, fintas, giros, pivotes.


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MINIBASKET: Parámetros y Leyes Fundamentales del Crecimiento

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MINIBASKET: PARÁMETROS Y LEYES FUNDAMENTALES DEL CRECIMIENTO

¿Cómo es el niño que juega / aprende Minibasket? ¿Cuáles son sus puntos fuertes y sus puntos débiles?

¿Sobre qué podemos trabajar y sobre qué no podemos trabajar los Instructores – Monitores – Entrenadores en el período de la edad evolutiva?

El niño tiene una evolución variable e impredecible. La ciencia (Auxología) estudia todos los aspectos biológicos del crecimiento y desarrollo físico.

FACTORES DEL CRECIMIENTO

Base Genética y Factores Ambientales

  1. Factores endógenos: Sexo, Raza, Factores genéticos, Factores hormonales.
  2. Factores nutricionales.
  3. Factores ambientales: Alimentación y Actividad Física.

El proceso de crecimiento conlleva la evolución de SISTEMAS y ÓRGANOS.  El tejido muscular crece durante toda la edad evolutiva. Masa muscular > aumento de la fuerza. La máxima velocidad de desarrollo de la masa muscular y de la potencia se da en la época puberal, cuando todavía la estructura y el peso presentan un rápido incremento. Paralelamente crecen también los órganos corazón y pulmones.

El Sistema Nervioso crece de manera rapidísima hasta su estabilización (2º año de vida al 75% de su potencialidad estructural).

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Aparato Locomotor

  1. Los huesos se alargan poco a poco, los músculos crecen en longitud.
  2. No sobrecargas, no multisaltos.
  3. Las articulaciones son débiles.
  4. Fases sensibles para el desarrollo de la movilidad articular.
  5. Cartílagos de crecimiento: zonas de transición hacia un verdadero tejido óseo.

Aparato Respiratorio

  1. Capacidad vital todavía baja, un elevado control simpático (Sistema Nervioso Autónomo) que eleva la frecuencia respiratoria. Esto mantiene una adecuada ventilación (a pesar de que las estructuras pulmonares están en fase de crecimiento: pulmones, caja torácica y músculos respiratorios).
  2. La respiración es preferentemente por la boca, la nasal aumenta sólo bajo esfuerzos.
  3. Es normal ver a un niño con elevada F. R. después de esfuerzos.

Aparato Cardio – Circulatorio

  1. Vasos – conductos: están en continuo cambio de forma, número y dimensión
  2. La tensión máxima y mínima son todavía bajas. La sangre tiene una alta velocidad de circulación.
  3. Corazón: pequeñas dimensiones, menor relleno y reparto sistólico, elevada frecuencia sobre todo después del esfuerzo. Los tiempos de recuperación son todavía muy variables, prevalencia de la estimulación simpática.

Aparato Endocrino

A través de la producción de hormonas regula las grandes funciones del organismo: crecimiento, metabolismo, reproducción y armonía funcional de variados órganos. Hipotálamo, hipófisis, tiroides, paratiroides, suprarrenales, páncreas, ovarios, testículos.

  1. Estructuración del eje hipotálamo – hipófisis – órganos claves en ciernes.
  2. Hormonas sexuales en secreción bajísima (tetosterona) (anabolizantes).
  3. Hormonas tiroideas (tiroxina, T3, T4) en progresivo aumento.
  4. Elevada secreción de adrenalina y noradrenalina en respuesta al estrés.

Necesidades de Energía

El músculo se contrae gracias al desplazamiento de la actina sobre la miosina, la energía necesaria para este trabajo viene proporcionada por moléculas.

ENERGÍA > Demolición del ATP

ATP es un acumulador de energía de capacidad limitada recargado a través de 3 mecanismos fisiológicos:

  1. Metabolismo energético anaeróbico aláctico.
  2. Metabolismo energético anaeróbico láctico.
  3. Metabolismo energético aeróbico.

Anaeróbico aláctico – Las reservas de ATP y PC son proporcionadas a nivel muscular, por tanto estamos en una fase deficitaria desde el punto de vista dimensional y coordinativo (los niños hacen movimientos no económicos, descoordinados). Proporciona mucha energía por unidad de tiempo, pero puede hacerlo sólo durante pocos segundos porque gasta rápidamente sus reservas.

Anaeróbico láctico – Déficit bioquímico, siendo un proceso enzimático con carencia de enzimas glicolíticas del 40% respecto a un adulto.

Aeróbico – Oxígeno que llega a la sangre. Limitado por el poco desarrollo del sistema cardio-respiratorio (corazón pequeño, pulmones pequeños, reducida masa sanguínea) a pesar de una FC mayor que el adulto que no compensa. La capacidad aeróbica es escasa en cuanto escasa es la estructura que la soporta. Con el entrenamiento se consiguen niveles de mejora.

ANALIZADORES Y ÓRGANOS DEL SENTIDO

Estructuras del Sistema Nervioso Periférico que proporcionan receptores para los estímulos internos y externos.

Analizadores del tacto > En la piel del cuerpo existen estructuras (corpúsculos de Pacini) que permiten sentir las características físicas de los objetos y su presencia sirve también para afinar la precisión.

Analizadores ópticos > Los ojos recogen la información del espacio en el que nos movemos (objetos, personas, profundidad, etc.).

Analizadores acústicos > Vehiculan la información acústica, sonora y verbal.

Analizadores cinestésicos > El huso neuromuscular en la base de las sensaciones motoras. De los nervios llegan las sensaciones de tensión de los músculos y de los tendones que después el cerebro elabora transformándolas en la representación interna del movimiento.

Aparato vestibular > Parte del oído interno, vehicula las informaciones sobre aceleraciones y deceleraciones del cuerpo respecto al espacio y la posición que la cabeza asume respecto al cuerpo.

FASES SENSIBLES

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Las Fases Sensibles identifican qué prestaciones gozan del mayor margen de entrenabilidad y mejora en las diversas edades.

5 – 8 Años

  • Estimular las capacidades coordinativas.
  • 5 – 6 años, actividades que estimulen la discriminación perceptiva.
  • 7 – 8 años, solicitar la maduración del sentido del equilibrio y el control de la lateralidad.
  • Primeras intervenciones sobre aspectos de la velocidad (respuesta a estímulos del Sistema Nervioso).

9 – 11 Años

  • Estímulos capacidades coordinativas.
  • Progresiva intervención sobre aspectos de la velocidad y de la fuerza.
  • Solicitar la movilidad articular.

CAPACIADES MOTORAS

Conjunto de las características físicas que un Jugador posee y que permite el aprendizaje y la ejecución de las variadas acciones motoras.

Capacidades condicionales

  • Conjunto de las características bioquímicas y morfológicas típicas del Jugador y que describen su potencialidad.
  • Representan prerrequisitos estructurales y funcionales relacionados también con la edad del Jugador.
  • Velocidad, fuerza, resistencia.

Sobre la base de estos prerrequisitos se desencadenan las habilidades motoras, la capacidad de automatizar un gesto atlético incluso complejo.

Capacidades coordinativas

  • Determinan la capacidad de control del movimiento.
  • Permiten la ejecución de gestos complejos articulados, precisos y rápidos.
  • Capacidades coordinativas generales: Aprendizaje Motor, Control Motor, Adaptación y Transformación.
  • Capacidades coordinativas especiales: Combinación Motora, Equilibrio, Orientación, Diferenciación Espacio-Temporal, Diferenciación Dinámica, Anticipación Motora, Fantasía Motora.

NIÑO DE 6 – 7 AÑOS

  • Pasa de una fase egocéntrica a socialización con el grupo.
  • Inestabilidad de la concentración.
  • Desarrollo y estructuración del “esquema corporal”.
  • Juego y fantasía son dominantes.
  • Paso de la fase explorativa a la de la organización y creatividad.
  • Mejora natural de la velocidad y de la coordinación.
  • Movimientos combinados.
  • Esquemas motores de base.

NIÑO DE 8 – 10 AÑOS

  • Se consolida progresivamente el aparato locomotor.
  • Aumento de la capacidad vital (corazón y pulmones).

Edad de la razón:

  • Mayor conciencia de si mismo > Se arriesga a hacer cosas.
  • Formulación de conceptos abstractos.
  • Mayor concentración.
  • Mayor capacidad de aprendizaje motor.
  • Mayor control motor.
  • Mayores obligaciones / peticiones / demandas / requerimientos motrices funcionales.


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MINIBASKET: Las 3 fases de la Coordinación General de los Movimientos

PAEB - 2014.02.24 - 02

MINIBASKET: LAS 3 FASES DE LA COORDINACIÓN GENERAL DE LOS MOVIMIENTOS

Seguiremos dos categorías de indicadores, la representación del movimiento y la ejecución del movimiento.

1ª FASE – Coordinación inacabada, tosca, áspera.

Representación (nivel cognitivo)

  • El plano del movimiento es impreciso y aproximativo.
  • La anticipación es vaga e incompleta.
  • La recepción de las informaciones es parcial e incompleta.
  • La carga cognitiva es redundante por demasiados detalles.
  • Los Alumnos- Jugadores carecen de varios componentes en el procesamiento cognitivo del movimiento.

Ejecución (nivel motor)

  • La fuerza empleada es escasa o excesiva.
  • La rapidez de movimientos es inadecuada por defecto o por exceso.
  • La precisión y la fluidez son escasas o están ausentes.
  • La economía de los movimientos es inadecuada por razón de los “grados de libertad redundantes”.
  • Los feedbacks cinestésicos son escasos y falta el “sentido del movimiento”.
  • El curso de los movimientos carece de tiempo, espacio y ritmo.

Consecuencias para quienes enseñamos y entrenamos: niños y niñas de 5 – 6 – 7 años, son así, piensan así, se mueven así, juegan a Minibasket o a Easybasket así. Por eso es inútil buscar, pedir sus ejecuciones complejas y someterlos a largas estresantes indicaciones técnicas. Instructor – Monitor, si no lo has comprendido aún, estudia y aplícate o déjalo ir.

2ª Fase – Coordinación fina.

Representación (nivel cognitivo)

  • El mapa motor mejora y se convierte en más preciso.
  • Aumenta la capacidad de comprensión de los errores y de las correcciones.
  • Las informaciones ópticas – visuales y cinestésicas son mejor interpretadas.
  • Aumenta la conciencia de los movimientos.
  • Alumnos – Jugadores aumentan el sentido de seguridad y el deseo de aprender.

Ejecución (nivel motor)

  • Las fases de los movimientos están conectadas con fluidez entre sí.
  • Mejora la relación espacio – tiempo y el ritmo de los movimientos.
  • La expresión de la fuerza es adecuada al objetivo.
  • Aumentan la precisión y la coordinación fina.
  • Los movimientos pueden ser repetidos con buena aproximación.

Consecuencias para quienes enseñamos y entrenamos: los niños y las niñas de 8 – 9 años son así, piensan así, se mueven así, juegan a Minibasket así. Por eso es útil ayudar – satisfacer su deseo de aprender, de mejorar, de enfrentarse con los problemas del juego, tratando cada vez de elevar el nivel. ¿Somos capaces de hacerlo y de acompañarles durante al menos un par de años?

3ª FASE – Disponibilidad variable.

Representación (nivel cognitivo)

  • Recepción de la información más rápida y completa.
  • Se perciben incluso mínimas variaciones sensoriales.
  • Anticipación oportuna y completa de la acción.
  • Programación de la acción correcta y flexible.
  • Los factores de distracción internos y externos son compensados.

Ejecución (nivel motor)

  • Aumenta la precisión y la constancia en entrenamientos y en competición.
  • El movimiento puede ser corregido y regulado en el transcurso de la ejecución.
  • Mejora la capacidad de adaptación al cambio de las condiciones externas.
  • Mayor automatización de los variados componentes en los movimientos complejos.
  • Mejora de la velocidad de movimiento y adecuado compromiso con el empleo de la fuerza.

Consecuencia para quienes enseñamos y entrenamos: los niños y las niñas de 10 – 11 años deben ser así, deben pensar así, deben moverse así, deben jugar así. De lo contrario, tu Instructor – Monitor, ¿qué nos haces?

No refugiarnos en nuestras certezas técnicas y cuidar, incluso después de los 12 años, la coordinación de los movimientos.

Estar también preparados para afrontar “fuertes cambios coordinativos” debido a los fenómenos de cambios críticos naturales como alargamiento de las palancas, aumento de masa muscular, cambios en el centro de gravedad.

Instructor – Monitor, Entrenador, se valiente, audaz, decidido, animoso, resuelto, preparado…pero consecuente.

«El proceso sistematizado de enseñanza – aprendizaje y de entrenamiento están basados en el conocimiento científico que trata de servirnos como herramienta innegociable para crear Jugadores formados, capaces, competentes, entusiastas, nobles, inteligentes, creativos y con afán de superación a lo largo de los ciclos y de los años, y en el cual confiamos para mejorar el conocimiento del juego, las habilidades, la autonomía, el rendimiento y obtener el éxito en la competición».

Queda por demostrar que las cosas “no habituales” sean mejor. Confiemos en la eficacia basada en la costumbre, en el hábito, en la práctica, en el estilo, en la experiencia, en el método.


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MINIBASKET Y BALONCESTO: Coordinación de Movimientos y Aprendizaje Motor

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En el texto «Motor coordination in sport and exercice» (Fidal – Centro Studi e Ricerche, 2.000) W. Starosta escibe…»Hablando de coordinación motora, dos nociones son utilizadas en la teoría y en la metodología de la educación motora, física y deportiva: la coordinación de los movimientos y la capacidad coordinativa que a menudo vienen mencionadas y se usan sin distinción o como sinónimos por cuanto se considera que sirven para describir un mismo fenómeno»…

CAPACIDAD COORDINATIVA: Características innatas, en cuanto a potencialidad genética del individuo.

COORDINACIÓN DE MOVIMIENTOS: Indica las modalidades externas, exteriores, visibles y apreciables de su expresión y al mismo tiempo el complejo proceso de coordinación entre el sistema nervioso central (SNC) y periférico y el complejo sistema motor-ejecutor.

La capacidad coordinativa se expresa a través de la coordinación de los movimientos; y no es un juego de palabras sino una relación de causa – efecto o feedback.

La coordinación de los movimientos tiene que ver con los factores genéticos y del desarrollo (dimensión funcional), pero al mismo tiempo está sujeta a modificaciones significativas, siendo el producto de la interacción con los estímulos exteriores (dimensión del aprendizaje). Plano ejecutivo de los movimientos y de su «mayor o menor eficacia coordinativa» que observamos y apreciamos. Cuidar juegos, ejercicios, actividades, tareas y situaciones que Monitores y Entrenadores realizamos con los Jugadores.

Algunas de las mejores informaciones en la materia y de las fuentes más acreditadas y compartidas son las que proporciona N. A. Bernstein en «Neurofisilogía del movimiento» cuando afirma que: «El manifestarse el problema motor a afrontar y su representación mental, constituye el factor y el hecho determinante tanto para la programación como para efectuar los movimientos necesarios para resolverlo, que cambian de individuo a individuo, y según la edad, las expresiones motoras y las condiciones externas».

Otro aspecto que debemos considerar es el grado de libertad del sistema motor cogiendo el término de la ciencia biomecánica.

El elevado número de «grados de libertad del sistema motor complica notablemente la expresión coordinativa de los movimientos en términos de economía y eficacia«. Es cierto que la coordinación de los movimientos necesita, por su misma naturaleza, de control y de inhibición sobre todo de los «grados redundantes de libertad «; de aquí la definición en síntesis extrema según la cual «la coordinación de los movimientos es de hecho la organización del control del aparato motor». Para comprender correctamente los movimientos en la dimensión de su aprendizaje y en la dimensión de su expresión y realización, deben ser analizados bajo el perfil de la eficacia del resultado y bajo el perfil de la coordinación.

Esto no quiere decir sin embargo que a la expresión de los movimientos, a la coordinación motora, no contribuyan otros factores, tales como los energéticos, ligamentosos y articulares; de hecho, existen necesariamente condiciones externas y condiciones internas que constituyen los presupuestos para el desarrollo de las capacidades motoras en general y para el aprendizaje de las habilidades motoras y deportivas en particular. Por no hablar también de las dimensiones motivacional y cognitiva.

En esta ocasión prescindimos de las características genéticas de las capacidades coordinativas, para evidenciar los aspectos propiamente motores, aunque es evidente que van a ser atentamente consideradas en proyectos generales de educación motora y de preparación a la práctica deportiva, tanto más si nos referimos al «deporte – juego» y, en nuestro caso al Easybasket y al Minibasket.

Modelos de aproximación al desarrollo de la coordinación motora

El aprendizaje, el control y el perfeccionamiento de los movimientos, de los esquemas de acción, de las habilidades deportivas y por lo tanto también de los fundamentos en nuestro caso, independientemente del tipo de actividad elegida, de la edad, y del nivel de maduración inicial, se articulan en fases sucesivas de desarrollo, relacionadas entre si según el grado de coordinación logrado del Jugador en la ejecución de las «habilidades motoras deportivas» y de su eficacia.

Podemos localizar 3 fases de ejecución de los movimientos que corresponden a 3 niveles de coordinación observables y concuerdan con otras tantas capacidades coordinativas generales, indicadas como capacidades de aprendizaje, de control y de adaptación y transformación de los movimientos.

1 – En el primer nivel, el de la capacidad de aprendizaje motor, los movimientos aprendidos son ejecutados en forma de coordinación inacabada, grosera, áspera, tosca, cuando los Alumnos – Jugadores tienen que aprender muchos contenidos y cuando son de temprana edad o no practicantes (principiantes), no son capaces de gobernar los grados de libertad excesivos del sistema motor a menudo caracterizados por errores e imprecisiones.

2 – En el segundo nivel, el de la capacidad de control motor, los movimientos aprendidos y repetidos son ejecutados de manera precisa y controlada en forma de coordinación fina a través de un notable y mayor control de los «grados de libertad» como los que se ejercitan en la coordinación en presencia de variaciones, por ejemplo, de las condiciones de equilibrio.

3 – El tercer nivel, el de la capacidad de adaptación y de transformación motora, se caracteriza por la disponibilidad de los movimientos aprendidos incluso en condiciones de variabilidad de las situaciones sean externas o internas en cuanto que el Alumno – Jugador está en condiciones de «gobernar» y explotar en su propia ventaja los grados de libertad que el sistema motor en su totalidad ofrece.

CAPACIDADES COORDINATIVAS

  • CAPACIDAD DE APRENDIZAJE
  • CAPACIDAD DE CONTROL > Puede predominar una característica de la ejecución: precisión, constancia,…
  • CAPACIDAD DE ADAPTACIÓN
  • CAPACIDAD DE TRANSFORMACIÓN
  • CAPACIDAD DE DISPONIBILIDAD VARIABLE

3 FASES TEMPORALES, EDUCATIVAS Y DIDÁCTICAS

1ª/  Aprender un movimiento y ejecutarlo de forma inacabada, tosca.

2ª/  Capacidad de control en el curso de la ejecución.

3ª/  Saber adaptar y utilizar el movimiento en diversas maneras, ocasiones y condiciones externas.

Todo se lleva a cabo a través de la práctica, de la repetición en condiciones de variabilidad, del entrenamiento.

Cada fase no se configura como rígida y definida, con líneas de demarcación netas entre un estadio y el otro. Cada etapa puede variar de niño a niño, de jugador a jugador, y depende en buena parte, incluso del repertorio inicial de cada uno, es decir del tipo (cantidad, calidad, variedad) de actividades motoras que el ambiente ha  estado en condiciones de estimular y de enseñar desde la infancia y que cada uno ha aprendido y practicado.

Traducción del artículo publicado en Basket Coach por el Prof. Fabrizio M. Pellegrini.